Monday, May 07, 2007

Fue mañana de Tunik en la ciudad de México y en este blog no encontrarán un reseña del tan memorable evento. Sí, debió de ser fabuloso, pero no caeré en la tentación de narrar algo que no viví. A la hora que salieron las primeras plicas yo estaba profundamente dormido con mi playera gris con la estampa de Celso Piña y algunos boxers cualquiera. Y me desperté y dije: caray, hoy me toca un huevo de desayuno. Y después salí a comprar el Récord, vicio que por más que intento no puedo dejar y creo que además, desayuné una manzana. Como ven, un día donde nada extraordinario pasó. ¿Decidí vivir del lado aburrido del día?